No bebamos rotas copas de sal,
Rojo cristal las empañó,
No sé por qué será,
Lo vivido, no vuelve atrás,
Pero es difícil olvidar.
Avivemos esa llama,
Del eterno suspirar.
Una y otra vez más,
Abrazaditos los dos.
Sin perder ni un minutito
de mágica y deliciosa obsesión
Si el desamor, heló tu
corazón,
No lo dudes, ni un segundo,
Cierra tus ojos, como en un sueño,
Y hallarás de nuevo el amor.
No habrá más frío en tu cama,
Encendiendo nuestras bocas,
Desangrándonos lentamente,
Abrazaditos al sol.
Quisiera depositar todo el
amor,
Que tengo aquí dentro para vos,
Que nace de mi pecho y termina,
Sobre tus labios en flor,
Como en un dulce y precioso viaje
Al universo íntimo de los dos.
Llama que despabila el corazón.
Semilla y fruto del amor.
Herida que abre el corazón.
La cierra otra que es caricia,
Lento fuego que protege,
Y grava una nueva canción.
Todos los poemas pertenecen a los AUDIO LIBRO de FRANCISCO ALVERO CANTA
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