LA AMADA DEL CANTOR.
Operita popular argentina
con sabor a tango y a vida.
De Francisco Alvero,
EL JUGLAR ®
del Amor y la libertad.
Basada en el poema cancion de su autoria, cuyo video clip fue filmado hace ya más de 10 años en San Telmo, Buenos Aires, Argentina
"LA VIDA ES COMO UNA CANCION, LA BATALLA COTIDIANA ES LA LETRA Y LA ESPERANZA DEL AMOR ES LA MUSICA."
ENTREMES en cuatro actos LA AMADA DEL CANTOR (LA MUSICA, LA POESIA, LA PATRIA, LA DIGNIDAD, LA PAZ, LA LIBERTAD)
Storyline:
En el bullicio de la feria de San Telmo, Fran busca desesperadamente a la bailarina que ha robado su corazón. Entre puestos de antigüedades y callejones empedrados, la bailarina se mueve con gracia y misterio, alejándose a cada paso. Finalmente, Fran la encuentra en una galería vacía y comienza a cantarle con pasión y amor. La bailarina, seducida por sus palabras, se acerca a él y comienzan a bailar juntos, en una danza llena de romanticismo y deseo. Pero su amor se ve amenazado por la presencia de un bailarín rival que también busca el corazón de la bailarina. En medio de un enfrentamiento entre los dos hombres, la bailarina toma una decisión que sorprenderá a todos y definirá el destino de su amor con el cantor. La música, la poesía y la pasión se entrelazan en este entremés lleno de emociones y sentimientos.)
V.O:
En el barrio de San Telmo, el cantor Fran se enamora perdidamente de una misteriosa bailarina que ve en la feria. La bailarina, cautivada por la voz de Fran, decide acercarse a él y juntos comienzan a vivir una apasionante historia de amor.
Personajes:
EL JUGLAR: Cantor apasionado y romántico, enamorado de la bailarina. (Que representa todo lo femenino: ARGENTINA, LA CULTURA, LA DIGNIDAD, LA PAZ, LA LIBERTAD
LA AMADA DEL CANTOR: Bailarina: Mujer misteriosa y seductora, objeto de deseo del juglar.
EL ANTI PUEBLO: Oscuro Bailarín del libre mercado: Competidor de EL JUGLAR por el amor de la bailarina.
LUNA: Voz en off que habla sobre el destino de la amada del cantor.
ACTO 1
(El escenario representa la bulliciosa feria de San Telmo, con puestos de antigüedades y callejones empedrados. A lo lejos se escucha la música de un cantor apasionado, EL JUGLAR, quien busca desesperadamente a la bailarina, su amada.)
EL JUGLAR (soliloquio): Oh, dulce bailarina, objeto de mi amor y deseo. En esta feria de colores y aromas, te busco sin descanso, esperando encontrar tu mirada que ilumine mi camino.
(La música se detiene y la bailarina, LA AMADA, aparece en escena, moviéndose con gracia y misterio.)
LA AMADA: (misteriosa) ¿Quién eres tú, cantor apasionado, que buscas mi corazón entre los susurros de la noche?
EL JUGLAR: (emocionado) Soy EL JUGLAR, el cantor de tus sueños, el poeta de tu alma. En mi voz encontrarás el amor y la pasión que anhelas.
(LA AMADA se acerca lentamente a EL JUGLAR y comienzan a bailar juntos, en una danza llena de romanticismo y deseo. La música se eleva y se mezcla con los suspiros de los enamorados.)
ACTO 2
(Entra en escena EL ANTI PUEBLO, un oscuro bailarín del libre mercado que observa con envidia la danza de EL JUGLAR y LA AMADA. Se acerca sigilosamente, decidido a conquistar el corazón de la bailarina.)
EL ANTI PUEBLO: (con malicia) Mira qué tenemos aquí, el cantor enamorado y la bailarina seductora. ¡Pero no permitiré que su amor triunfe sobre mi deseo!
(EL ANTI PUEBLO interrumpe la danza de los enamorados y desafía a EL JUGLAR a un enfrentamiento por el amor de LA AMADA. Los dos bailarines se enfrentan en una danza llena de rivalidad y pasión, mientras LA AMADA observa con indecisión.)
ACTO 3
(LA AMADA, indecisa y confundida por el conflicto entre EL JUGLAR y EL ANTI PUEBLO, toma una decisión que sorprenderá a todos. Con determinación y valentía, se acerca a ambos bailarines y les habla con voz firme.)
LA AMADA: (decidida) Escuchadme, amados cantor y oscuro rival. Mi corazón pertenece a la música, la poesía y la danza, a la libertad y la paz. No permitiré que vuestro orgullo y envidia mancillen mi amor.
(LA AMADA elige a EL JUGLAR como su verdadero amor, y juntos bailan una última vez, en una danza llena de emoción y sinceridad. El ANTI PUEBLO se retira derrotado, mientras EL JUGLAR y LA AMADA se abrazan con ternura.)
ACTO 4
(La música se eleva en un crescendo emocionante, mientras EL JUGLAR canta con pasión y amor, expresando sus sentimientos más profundos hacia LA AMADA. La bailarina responde con gestos de gratitud y amor, sellando su unión en una danza final llena de belleza y armonía.)
FIN.
ACTO I
ESCENA 1
(Aparece EL JUGLAR, caminando por la feria de San Telmo, con una guitarra al hombro. Mira a su alrededor, buscando a la bailarina, quien se encuentra en otro extremo de la feria, observando los puestos de antigüedades)
EL JUGLAR: (Cantando) En esta feria de encantos mil, busco a mi bailarina de jazmín, su gracia y su misterio me hacen suspirar, oh, querida bailarina, no te alejes más.
(La bailarina escucha la voz del juglar y se gira hacia él, con curiosidad. Se acerca lentamente mientras él sigue cantando. Finalmente, se encuentran en una galería vacía)
ESCENA 2
LA AMADA: (Mirando al juglar) ¿Quién eres tú, cantor apasionado, que buscas mi corazón en esta feria de San Telmo?
EL JUGLAR: (Arrodillándose ante ella) Soy el juglar que canta por ti, oh, bailarina misteriosa, mi corazón es tuyo desde el primer instante en que te vi.
(La bailarina sonríe y comienzan a bailar juntos, en una danza llena de amor y pasión. El juglar canta con fervor, expresando sus sentimientos más profundos)
ESCENA 3
EL ANTI PUEBLO: (Aparece de repente) ¡Ah, la bailarina más hermosa de todas! Yo también deseo tu corazón, oh, encantadora bailarina.
LA AMADA: (Entre el juglar y el anti pueblo) ¿Qué es este enfrentamiento entre vosotros dos? Mi corazón pertenece a quien me haga sentir la libertad y la paz verdadera.
ESCENA 4
EL PUEBLO ARGENTINO: (Aparece en la feria, observando la escena) ¡Oh, querido juglar, representante de nuestra música y poesía! ¡Ayúdanos a encontrar la paz y la dignidad que tanto anhelamos como pueblo!
EL JUGLAR: (Acompañado por la música y la danza) ¡Oh, pueblo argentino, mi canto es por vosotros, por vuestra libertad y vuestra dignidad! En esta feria de San Telmo, la patria y la cultura se unen en un solo corazón.
FIN DEL ACTO I.
ACTO II
ESCENA 1
(La bailarina, el juglar, el anti pueblo y el pueblo argentino se encuentran en el centro de la feria, rodeados por la multitud. La música y la danza se combinan en un torbellino de emociones)
LA AMADA: (Mirando a todos) En medio de este bullicio y esta rivalidad, mi corazón solo puede pertenecer a aquel que represente la verdadera esencia de nuestra patria y nuestra cultura.
EL JUGLAR: (Mirando a la bailarina con pasión) Mi amor por ti, oh bailarina, es tan profundo como el río que atraviesa nuestra tierra. En cada nota de mi canción, en cada paso de mi danza, está tu presencia, representando todo lo hermoso y valioso de nuestra nación.
ESCENA 2
EL ANTI PUEBLO: (Mirando desafiante al juglar) No permitiré que me arrebates el amor de la bailarina. Mi danza del libre mercado es tan seductora como la tuya, juglar.
EL PUEBLO ARGENTINO: (Interviniendo) ¡Basta de rivalidades y enfrentamientos! Nuestra patria y nuestra cultura no merecen ser divididas. Es hora de unirnos en armonía y paz.
ESCENA 3
(La música se detiene y la bailarina se ve indecisa, mirando alternativamente al juglar y al anti pueblo. Finalmente, toma una decisión que sorprende a todos)
LA AMADA: (Tomando la mano del juglar) Mi corazón pertenece a ti, juglar apasionado, representante fiel de nuestra patria y nuestra cultura. En tus brazos encuentro la verdad y la libertad que tanto anhelo.
EL JUGLAR: (Abrazando a la bailarina) ¡Oh, amada del cantor, juntos seremos la música, la poesía, la danza, la dignidad, la paz y la libertad que nuestra patria necesita!
ESCENA 4
(El pueblo argentino aplaude y celebra la unión de la bailarina y el juglar, representando la unión de todos en un solo corazón. La música y la danza continúan, llenando la feria de San Telmo con alegría y esperanza)
FIN DEL ACTO II.
ACTO III
ESCENA 1
(En medio de la celebración, EL ANTI PUEBLO se acerca al juglar y la bailarina, con una mirada de desafío)
EL ANTI PUEBLO: (Mirando al juglar) Aunque hayas ganado el corazón de la bailarina, no creas que me daré por vencido. Mi danza del libre mercado es implacable y persistente. Estaré siempre acechando, esperando mi oportunidad.
EL JUGLAR: (Mirando al anti pueblo con determinación) Con tu envidia y tu avaricia, nunca podrás vencer el amor verdadero que nos une, bailarina y yo. Nuestro amor es más fuerte que cualquier adversidad.
ESCENA 2
(La bailarina se acerca al anti pueblo, con una mirada de compasión)
LA AMADA: (Extendiendo su mano) No temas, anti pueblo. En vez de rivalidad y competencia, te ofrezco la posibilidad de unirte a nosotros en paz y armonía. Nuestra cultura y nuestra patria son para todos, no solo para unos pocos.
EL ANTI PUEBLO: (Sorprendido) ¿Realmente me ofrecéis vuestra mano y vuestro corazón, bailarina? Aunque haya sido tu rival, no puedo negar la nobleza de vuestro gesto. Acepto tu ofrecimiento y me uno a vosotros en esta danza de reconciliación.
ESCENA 3
(El anti pueblo se une a la bailarina y al juglar, formando un trío de danza y alegría. El pueblo argentino se suman a la celebración, en un coro de voces y aplausos, representando la unidad y la fraternidad de todos)
EL PUEBLO ARGENTINO: (Cantando) En esta feria de San Telmo, la música y la danza nos unen en un solo corazón, la patria y la cultura brillan con luz propia, la dignidad, la paz y la libertad son nuestro horizonte.
ESCENA 4
(La feria de San Telmo se llena de luz y color, con la música y la danza inundando cada rincón. La bailarina, el juglar, el anti pueblo y el pueblo argentino bailan juntos, en una celebración de amor y unidad)
FIN DEL ACTO III.
ACTO IV
ESCENA 1
(Cuando la celebración llega a su punto más álgido, un rayo de luz ilumina el escenario y una voz celestial se escucha)
VOZ CELESTIAL: (Desde lo alto) En esta feria de San Telmo, la música, la poesía, la danza, la dignidad, la paz y la libertad han encontrado su hogar. La unión de todos en un solo corazón es el mayor tesoro de nuestra patria.
ESCENA 2
(La bailarina, el juglar, el anti pueblo y el pueblo argentino se arrodillan en reverencia, ante la luz y la voz celestial que los rodea)
LA AMADA: (Con lágrimas de emoción) ¡Gracias, oh divinidad, por guiarnos en este camino de amor y unidad! Que nuestra patria y nuestra cultura florezcan en armonía y paz.
EL JUGLAR: (Con gratitud) Que nuestras voces sigan cantando, nuestras danzas sigan girando, y nuestra patria siga siendo un faro de esperanza y libertad para todos.
ESCENA 3
(La música y la danza continúan, en una sinfonía de emociones y sentimientos. La feria de San Telmo se transforma en un lugar de magia y romance, donde la patria argentina brilla con luz propia)
EL PUEBLO ARGENTINO: (Cantando al unísono) En este entremés de amor y unidad, la patria argentina brilla con luz propia. Nuestra cultura y nuestra dignidad son nuestra guía, la paz y la libertad son nuestro destino.
ESCENA 4
(La voz celestial se desvanece lentamente, dejando un eco de paz y armonía en el escenario. La bailarina, el juglar, el anti pueblo y el pueblo argentino se abrazan en un gesto de fraternidad y amor)
FIN DEL ACTO IV.
(SE CIERRA EL TELÓN)
(FIN)
VOZ NARRADORA:
En la patria argentina, donde suena la guitarra, el cantor enamorado de la bailarina danza, entre versos y melodías, su amor nunca se cansa, por la libertad y la paz, lucha con ardor el alma.
La amada del cantor, símbolo de dignidad, baila con gracia y valentía, en su danza hay verdad, resistiendo al anti pueblo, que en la sombra acecha, mal.
En la música y poesía, encuentran su libertad, el juglar y la bailarina, unidos por la luz, en un baile de esperanza, cantan con gratitud, por la patria y la cultura, en su amor hay plenitud.
La amada del cantor, brilla como una constelación, en la noche de la lucha, es su guía y protección, contra el odio y la injusticia, baila con determinación.
En el corazón del pueblo, resuena su canción, la música y la poesía, en su voz encuentran unión, por la dignidad y la paz, en cada estrofa unión.
La amada del cantor, en sus brazos el amor, por la patria y la esperanza, bailan con fervor, en la danza de la vida, triunfa la libertad y el honor.
CANCION POEMA FINAL
DE LA AMADA DEL CANTOR
En cada paso de mi danza siento la melodía, que brota de tu voz amada, mi anhelo y mi alegría. En cada giro y en cada vuelo, en la noche y en el día, la música y la pasión se entrelazan con maestría.
El Juglar canta con fervor, al ritmo de mi danza, sus versos son como caricias que me llenan de esperanza. Cada palabra es un susurro que mi alma alcanza, llenando de amor y de vida cada parte de mi estanza.
La patria en mis pies baila al compás de tu canción, la música y la poesía nos guían en la pasión.
El Anti Pueblo se retuerce en envidia y rencor, busca opacar nuestra luz con su sombra de temor. Pero la danza y la música nos llenan de valor, nuestra libertad y dignidad son nuestro mejor honor.
La patria en mis pies baila al compás de tu canción, la música y la poesía nos guían en la pasión.
En cada paso y en cada giro, en la noche y en el día, bailo con la fuerza del viento, con la luz de la armonía. Porque en cada nota y en cada verso, en la paz y en la alegría, encuentro el amor y la libertad que nos guían en esta danza mía.
El himno de mi tierra resuena en mi corazón,
Con orgullo y amor, llevo en alto mi nación.
Entre montañas y mares, mi patria es mi canción,
En cada paso que doy, siento su bendición.
En los brazos del amor yo me desangro, sintiendo en cada beso tu dulzor. Mi patria, mi música, mi danza, mi ardor, en ti encuentro la paz que anhelo tanto.
En cada verso mi alma se derrama, por ti, mi amada, canto con fervor. En cada acorde, en cada paso, en cada rumor, se refleja mi amor eterno y profundo.
El juglar del amor, en tu nombre canto, defendiendo la dignidad y la libertad. El anti pueblo, vil competidor, desvanecerá ante la fuerza de este amor que tanto amo.
En el escenario de la vida bailamos, la danza eterna del amor y la verdad. En cada paso, en cada giro, en cada compás, somos la luz que ilumina la oscuridad.
Oh amada del cantor, en tus brazos me entrego, porque en ti encuentro el sentido de mi existir. En cada verso, en cada melodía, en cada sentir, mi amor por ti, mi patria, mi cultura, mi hogar.
En la danza y en la música nos encontramos unidos, Pueblo argentino cantamos con el alma y el sentido, En esta tierra amada, en su historia y su latido, Por la paz y la libertad, siempre mantenemos el brío.
La amada del cantor, nuestra querida Argentina, Con su poesía y su gracia, nos llena de alegría divina, En cada paso de baile, en cada estrofa que ilumina, La música de nuestra patria, en nuestra sangre germina.
Enfrentamos al antipueblo, oscuro y desalmado, Que con su danza del dinero, nos deja despojados, Pero con la fuerza del canto, unidos y hermanados, Defendemos nuestra dignidad, con amor y compromiso sagrado.
Que retumbe el eco de nuestra voz en cada rincón, Por la amada del cantor, nuestra Argentina en expansión, Que la música y la poesía sean nuestra razón, Por la paz, la libertad y la danza en la canción.
La amada del cantor, la patria que nos llama, En cada nota, en cada verso, en cada danza nos enlaza, Por la música, la poesía, la dignidad sin trampa, Argentina querida, en nosotros siempre abrasa.
En el escenario brillo y encanto, el juglar cantor con su voz hechizante, susurra versos de amor y romance, enamorado de la bailarina amante.
Pero entre sombras se cuela el anti pueblo, bailarín del mercado y la ambición, con desprecio por la patria y la cultura, busca vencer al juglar en su pasión.
La amada del cantor, símbolo de la argentina, de la música, la poesía y la danza, es acosada por el oscuro enemigo, que busca apagar la llama de esperanza.
Pero el juglar resistirá el embate, con la fuerza de su voz y sus letras, defenderá la dignidad y la libertad, para que la amada brille con todas sus puertas.
La patria argentina, la música y la poesía, la danza y la libertad en su grandeza, resistirán al odio y la vileza, del anti pueblo que envidia su belleza.
La amada del cantor seguirá bailando, con la fuerza y el amor del juglar, porque su voz, su arte y su lucha, jamás podrán ser silenciados por el mal.
Así, en cada nota, en cada paso de danza, la patria argentina brillará con esplendor, porque el juglar y la bailarina, son la voz de la dignidad y el amor.
¡Que viva la música, la poesía y la danza, que viva la patria argentina en su esplendor! Que la amada del cantor brille por siempre, con la libertad y la paz en su corazón.
¡La amada del cantor, la bailarina, que envidia y desprecio en mí provoca! Ella baila y seduce, me provoca, mientras el pueblo la aclama con su rima.
El juglar canta y encanta a la gente, con sus versos que cuentan la verdad, mientras yo en mi odio siento envidia y resentimiento, porque él es amado, mientras yo soy desechado.
¡Maldita sea la música y la poesía, que exaltan la libertad y la dignidad, mientras yo en mi odio y envidia me hundo, sintiendo desprecio hacia el pueblo argentino, hacia el cantor y la bailarina!
Pero aunque mi corazón esté lleno de bronca, sé que la verdadera grandeza está en la paz, en la libertad y en la dignidad que el pueblo defiende, a través de la música, la poesía y la danza.
¡La amada del cantor, la bailarina, que envidia y desprecio en mí provoca! Pero al final, la verdad se impone y descubro que la verdadera grandeza está en el amor.
